
Mis ojos miran la inmensidad
Y mis pulmones brotan de felicidad
Mi alegría depende del sol con luna
ese es mi sentir…
día y noche yo vivo
vivo entre dos mundos
uno se sabe sin sentir
el otro se siente sin pedir
Soy y somos; emprendedores de nuestro destino a manos de la disiplina; nuestro andar nos ha llevado a un camino, que regresa a las raices de nuestra humanidad, de nuestra caballerocidad, de respeto a la vida y amor cómo guía; con espada en mano, con armadura ligera y tierra abierta, compartimos nuestro pasos. Dos caminos se siguen gestan el del maestro que en este caso es La bruja, y el de los disipulos: Miguel, Marco y Rodrigo
Adios le dijiste al caballero
Que partia pal norte.
Te Dijo después de un beso:
piensa que solo me voy al monte
Aquella partida como muchas, casi como todas
Hablaba de la incertidumbre
Hablaba del corazón bandido
Que amarra mejor que el puerto al bote
Que te duele y que te quejas
Que no sé que vida cargas
Que la vida no tiene fin
Mira ese gato encendido en pasivo brío
Mira el cielo eterno
Piensa en el ser etéreo,
Con su fina figura cabila al aire
Felinas historias para desentrañar el universo
Miro ese gato
Creo que se cree sabio,
Sabia es la luna, que nos sigue con sigilo
Nos enseña a esperar
A tiempos respetar;
A veces a despertar
Nos enseña a dormir
A veces a soñar
Nos enseña a mirar entre la oscuridad
Nos permite ver más allá de la claridad
Ay! Que noche,
Donde se mueven más que las nubes
Más que el cielo
Más que las estrellas